BUENOS AIRES.- Una jugada bien, de las que gustan y hacen la diferencia. ¡Por fin acertó Boca! El "xeneize" debió esperar demasiado para regalarle una sonrisa a sus hinchas. La tocó Román, que asistió a Lautaro Acosta y "Laucha" mandó el centro al pecho de Pablo Ledesma, que así se la bajó a Walter Erviti. Misil bajo y golazo. El "xeneize" pegaba primero en La Bombonera ante el siempre complicado Arsenal.
Con ese gol hizo la diferencia el equipo de Carlos Bianchi, que tuvo pasajes de buen fútbol, justo en el día de la vuelta de Román. El ídolo también tuvo la suya, una exquisitez que picó por arriba y que Cristian Campestrini logró pellizcar al poste. Un par de despilfarros siguieron al 1-0, pero con eso alcanzó para que el equipo de La Ribera saliera del fondo (ahora es ante penúltimo, junto con Unión y Vélez).
El último puesto para un Boca que se preparó para todo y se quedó sin nada era demasiado bochornoso. Por eso la importancia del triunfo. Sí, demasiado amarrete el objetivo, porque que un grande festeje no ser último es un problema más que serio, pero era lo que el equipo del "Virrey" debía evitar antes de finalizar el torneo, y lo hizo.
Arsenal hizo su partido, como siempre complicando. Y pudo hacer mucho más, de no haber sido por la pésima noche de Germán Delfino. El árbitro le anuló mal un gol a Julio Furch, por un offside inexistente. Aunque tan malo fue lo del juez, que hasta estuvo parejito: obvió un claro penal en favor del anfitrión, por una mano de Diego Braghieri dentro del área.
Igualmente, lo del "xeneize" fue justicia, porque en la cancha fue el que más buscó, el que propuso, y el que a pasar de las manchas del juez de negro, se fue contento de la cita.
"Esta actuación fue acorde con lo que uno pretende. Arsenal es un rival que puede complicar a cualquiera, y haber creado tantas situaciones de gol hace que nuestra actuación nos deje conforme, aunque se termina ganando con sufrimiento", dijo el "Virrey", consiente de que aún no hay nada resuelto. "Valoro el haber manejado el balón correctamente contra un equipo que sabe presionar", entendió el DT, que ya pone la mente en All Boys, el rival del miércoles por Copa Argentina, el último frente "xeneize". (Especial)